martes, 31 de mayo de 2011

EN LA DUDA ¿ABSTENERSE SIEMPRE?

"En la duda abstenerse" es un dicho proverbial y aceptado como válido. Y lo es por lo general. Hasta que surgen situaciones que nos hacen pensar un poco más.
Se ve claro que si no tengo certeza, lo lógico es no proceder a actuar, ni en pro ni en  contra. Necesito buscar información, si el asunto amerita el esfuerzo.
Se ve claro que no proceder puede ser aceptable cuando el asunto es sólo mío, no influye ni influirá sobre nadie más. Lo cual no es tan fácil en nuestra vida, comunitaria y comprometida, pero puede ser.
Las dudas existirán siempre en la mente humana. Pero también tenemos capacidades cognitivas que nos ayudan a analizar, a prever consecuencias, a decidir.
Y tenemos capacidades éticas que nos ayudan a diferenciar entre las consecuencias mejores y peores, por lo menos.
Usar sus capacidades cognitivas y éticas es lo que corresponde hacer, en situaciones sociales críticas, a quienes piensan que en la incertidumbre lo correcto es abstenerse.
Si mi abstención va a tener consecuencias no sólo para mí sino para otros, entonces abstenerse pasa de ser una opción personal a ser una irresponsabilidad social.

Así que, "en la duda, abstenerse no siempre".

viernes, 27 de mayo de 2011

DONDE DIOS NO ES AMADO, NO SERÁ NADIE RESPETADO NI AMADO

Esta cita nos abre los ojos para ver la raíz de muchos conflictos interpersonales o grupales.
Se suele creer que la vida "mundana" avanza por un camino y la vida "espiritual" avanza por otro camino. Se cree que -tal vez- puedan ser vías paralelas, pero siempre separadas.
Ese es el error.
La vida cotidiana donde no hay Dios y Señor que nos ama y nos guía al bien, es como un lugar abandonado donde no puede haber ni limpieza ni orden.
Yo no he visto nunca una persona sin Dios que viva una vida dignamente humana, donde se respete -¡de verdad!- al otro o se le ame.
Pueden ser personas hasta de apariencia honorable pero con demasiadas sombras en el alma y con errores en el trato a los demás y, sobre todo, errores que no son capaces de reconocer y corregir.

lunes, 23 de mayo de 2011

OBSERVANDO LA VIDA 16.

jueves, 19 de mayo de 2011

¿LOS PRINCIPIOS SON SÓLO OPINIONES PERSONALES?

Hasta donde entiendo, los principios éticos son para vivirlos, no sólo para pensarlos o declararlos.
Comienzan en el razonamiento y la reflexión pero pasan a regir nuestra conducta.
Son guía y fuerza para la acción humana.
Si actuamos éticamente es porque los principios nos dirigen en pensamiento, sentimiento y acción.  Los principios son valores.
Entonces ¿cómo es posible que veamos a diario personas que explican sus vaivenes éticos en función de su derecho a cambiar de opinión?
Y, además, añaden que sus pricipios = opiniones  son personales y -por ende- no incumben a nadie más.
Algunos principios o convicciones podrán variar a lo largo de la vida de una persona, pero no pueden depender de la conveniencia personal y cambiar prontamente según el tiempo y el lugar.
Si lo hacen, ya no son principios, son etiquetas utilitarias.

lunes, 16 de mayo de 2011

OBSERVANDO LA VIDA 15.

domingo, 8 de mayo de 2011

OBSERVANDO LA VIDA 14.

miércoles, 4 de mayo de 2011

¿SERVIR AL DINERO O SERVIRNOS DEL DINERO?

El dinero es un "poderoso caballero", según dice el refrán castellano.
Caballero poderoso si lo servimos, si permitimos que nos condicione a reverenciarlo.
Lo servimos si lo amamos sobre todo, si lo valoramos como si tenerlo fuera la "cualidad" personal más importante, si por él somos capaces de mentir, traicionar, practicar la injusticia, robar.
Necesitamos del dinero, pero para servirnos de él. No para reverenciarlo como a un señor, sino para usarlo y usarlo con sensatez.
Hoy en día circula la idea de que mirarlo y tratarlo con buen juicio nos impide ser ricos. Como que sólo puede ser rico el que ama el dinero.
Creo que apreciarlo en toda su utilidad no debería nunca llevarnos a ponerlo en el primer lugar de nuestras vidas.
Trabajamos por dinero (aunque no sólo por él), exigimos el dinero que en justicia merece nuestro esfuerzo, y lo administramos.
¿Qué tal si dejamos de endiosarlo? Seguramente vendrá más dócilmente a nosotros.
¿Probamos?