sábado, 16 de octubre de 2010

ALEGRÍA GRANDE.

Comenzó con una noticia trágica. Tantos hombres atrapados en las profundidades de la tierra. Nos estremeció a todos.
Y, sin importar fronteras ni memorias, todos nos solidarizamos con esa angustia . Somos seres humanos y podemos ser solidarios.
Y, sin importar lejanías ni nacionalidades, todos contribuimos como pudimos. Muchos fuimos los que oramos a diario, oramos  por fortaleza para los enterrados, por habilidad para los rescatistas, por bien para todos. Somos solidarios y siempre podemos cooperar.
Y fuimos escuchados. Ocurrió el milagro, fruto de la misericordia de Dios, de la fuerza de la oración desinteresada y del apoyo, la perseverancia y el ingenio humanos.
LECCIONES PARA TODOS :
1. Los problemas surgen a pesar de las precauciones.
2.Hay que saber buscar y aceptar la ayuda cuando es necesario, y hay que saber darla siempre que se pueda.
3. Cuando se recibe, se debe agradecer. Ni la alegría más grande debería ponernos triunfalistas y menos, ingratos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

A los mineros se les debe dejar en paz y no estarles ofreciendo dinero por sus declaraciones de lo que vivieron. Igualmente no puede vender como una noticia de éxito a favor del gobierno de ese país.